domingo, 18 de diciembre de 2016

 Durante los días 14 y 15 de diciembre de 2016, se han desarrollado en Aranjuez unas Jornadas de participación sobre el Plan de Gestión del Paisaje Cultural de Aranjuez, en el Teatro Carlos III de Aranjuez, organizadas por el Ayuntamiento, la Fundación Aranjuez Paisaje y el Foro Cívico de Aranjuez.



El Foro Cívico de Aranjuez está constituido por un grupo de mujeres y hombres, cuyo objetivo es contribuir, desde nuestras capacidades y medios, al debate cultural y la defensa de los valores del legado histórico y patrimonial de Aranjuez.
Con la intervención en estas jornadas de participación pretendemos ofrecer nuestro punto de vista sobre la situación actual de Aranjuez, como Paisaje Cultural, trasladando a quienes participan en ellas la inquietud que sentimos al percibir el declive de muchos de sus valores y la preocupación que nos provoca la falta de iniciativas para resolver lo que consideramos sus principales problemas.
 

Estas Jornadas de Participación debieran ser la oportunidad para RECUPERAR LAS ILUSIONES, PROPONER SOLUCIONES Y SEÑALAR LOS RETOS EN LOS QUE TODOS DEBEMOS COMPROMETERNOS.
Aranjuez como Paisaje Cultural Patrimonio de la Humanidad
El Aranjuez de hoy es el fruto acumulado de 440 años de sucesivas intervenciones del hombre sobre un medio natural, con un resultado de extraordinaria belleza, capaz de inspirar a artistas y literatos de forma ininterrumpida desde su primitiva creación. Un lugar excepcional, con unos valores universales reconocidos por la UNESCO en 2001.
 

En ese largo recorrido, cada generación fue dejando sus huellas, a veces heridas, que reflejan las luces y las sombras de la responsabilidad con que se asumió la preservación del legado recibido y la necesidad de darle continuidad, manifestando la relevancia que en cada momento se dio a estos singulares valores.
Los cambios sociales y políticos acaecidos en España durante el S. XX transformaron el papel activo de la ciudadanía, que, después de periodos oscuros, debieron asumir, a través de las nuevas instituciones democráticas, la definición y defensa de sus valores patrimoniales y territoriales, valorando la importancia de ese legado histórico y cultural, y propiciando actuaciones orientadas a su protección y recuperación. Un movimiento inherente a la democracia que ha recorrido durante estos años todos los rincones de España, pues no existe ciudad o villa donde no se haya intervenido en el patrimonio, con mayor o menor acierto, todo hay que decirlo. Aranjuez no ha estado al margen de esa problemática general, sino que ha sido, más bien, un exponente de ella. Quizás más en carencias y equivocaciones que en aciertos, aunque estos fueran importantes.
 

El desvío de la carretera N-IV, la elaboración y aprobación en 1982 del Plan Especial de reforma interior del casco histórico, la rehabilitación de la Plaza de San Antonio y la recuperación de edificios tan significativos como el C.C. Isabel de Farnesio, son algunos de ellos, aunque el más relevante sea la intensa labor desarrollada por la ciudadanía para la inclusión de Aranjuez en la Lista de Patrimonio de la Humanidad, a través de
Paisaje Cultural Aranjuez: jornadas de participación sobre el Plan de Gestión 2 | F o r o C í v i c o asociaciones y entidades privadas, como Doce Calles y Puente de Barcas. Algo en lo que se debe seguir trabajando, pues, aunque este reconocimiento no ha hecho de Aranjuez lo que es, sí nos ha ayudado a entender por qué es tan excepcional y ha reforzado nuestra proyección internacional.
 

Quince años después de la declaración
LA LÍCITA SATISFACCIÓN, TRAS LA DECLARACIÓN DE PAISAJE CULTURAL PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD PARA ARANJUEZ, PROVOCÓ UNA BURBUJA DE EUFORIA Y ESPERANZA, QUE LA REALIDAD HA DESINFLADO.
Los escasos logros obtenidos desde esa fecha han servido, también, para destapar los problemas estructurales que siguen constituyendo, en este momento, amenazas para ese mismo paisaje cultural. La recuperación del Real Coliseo de Carlos III evidencia la lentitud de los procesos; la rehabilitación de la Azuda demuestra la necesidad de que los ciudadanos sigan promoviendo actuaciones concretas; la rotonda de Doce Calles, realizada a través de la ejecución de avales privados, muestra la cara amable de una cruz urbanística, como es el PAU de la Montaña; así como la remodelación de la plaza de Parejas, en contraste con el entorno degradado de la Casa de Fogones, nos hace ver la descoordinación de las Instituciones y nos traslada a un escenario de batallas políticas, cuyo máximo exponente es el conflicto, aún latente, del Raso de la Estrella.
 

Quince años después, podemos comprobar que los esfuerzos realizados no han logrado frenar la degradación de elementos fundamentales de nuestro paisaje, mientras que las carencias preexistentes en aquel momento arrojan unas sombras aún más alargadas, poniendo en riesgo, incluso, su supervivencia. En resumen, es inevitable expresar la discrepancia entre la trascendencia de la calificación obtenida y el alcance de las inversiones generadas para su conservación y prolongación futura. No se puede continuar en la vía de la autocomplacencia, pues resulta una vía muerta.
 

Muestra de ello es que se mantiene la lamentable situación de nuestros ríos, que reflejan una gestión insostenible del agua, acelerando la degradación del sistema hídrico que alimenta la red vegetal de nuestro paisaje. El ínfimo caudal de agua que circula por el cauce del Tajo (a consecuencia del Trasvase), la pérdida de humedad del suelo y el deterioro de los sistemas tradicionales de riego, junto con la falta de mantenimiento, están poniendo en grave riesgo la existencia de muchos de sus elementos.
Seguimos sin una planificación estratégica que facilite la coordinación institucional y garantice un reparto proporcional del esfuerzo que las distintas administraciones deben realizar para su sostenimiento. La falta de esta planificación, además, dificulta la gestión haciéndola poco eficaz y muy opaca. Tampoco se cuenta con un instrumento de gestión asumido, como tal, por parte de todas las administraciones responsables de su sostenimiento, ni con un espacio a través del cual se pueda canalizar la colaboración y la participación de la ciudadanía, algo imprescindible para crear un clima social de responsabilidad compartida.
 

El Plan General de Ordenación Urbana vigente sigue sin adaptarse a esta nueva realidad y, por tanto, carece de las determinaciones necesarias para la protección y
Paisaje Cultural Aranjuez: jornadas de participación sobre el Plan de Gestión 3 | F o r o C í v i c o gestión de nuestro paisaje, tal como viene definido en la declaración de la UNESCO, convirtiéndose en un obstáculo para la solución de los problemas que afectan a zonas relevantes del mismo. Por otro lado, la falta de sensibilidad de organismos como ADIF, o el sistemático incumplimiento de los compromisos del Gobierno de España respecto al desvió de la línea ferroviaria C3 impiden recuperar la integridad de los paseos y huertas de Picotajo y mantienen en una situación lamentable espacios tan relevantes como el entorno de la estación y su conexión con el Raso de la Estrella. Cabe señalar también la falta de soluciones a los problemas de accesibilidad y movilidad que afectan muy negativamente a la imagen de la ciudad y a nuestro paisaje, a la excesiva concentración de automóviles en el casco histórico y los entornos monumentales, así como a las dificultades, casi insalvables, de comunicación peatonal entre las márgenes del rio, sobre todo entre el Raso de la Estrella y las Huertas de Picotajo.
 

En cuanto a la asignación de los recursos económicos necesarios para la preservación y mantenimiento de los elementos que conforman el Paisaje Cultural de Aranjuez, es evidente que, más allá del impacto que la actual crisis económica ha podido tener en la reducción de los mismos, se viene arrastrando una falta significativa de compromiso presupuestario por parte del Gobierno de España, del que directamente depende Patrimonio Nacional, y de la Comunidad de Madrid, propietarios y responsables de la mayor parte de la zona declarada Patrimonio Mundial. Esto, además de volcar injustamente una gran parte del esfuerzo para su sostenimiento sobre la administración local, está acelerando, por falta del adecuado mantenimiento, el deterioro de espacios tan sensibles como los jardines históricos de la Isla y del Príncipe o los paseos arbolados de las huertas históricas.
 

Cerrar este periodo de quince años no puede hacerse pasando por alto las consecuencias de las decisiones unilateralmente tomadas que, sin informar previamente a la ciudadanía ni contar con las instituciones locales, han ocasionado, entre otras cosas, la sustitución de esculturas originales de los jardines históricos de la Isla y del Príncipe por réplicas de material sintético.
La aprobación del Plan de Gestión nos da la oportunidad de responder de forma más eficaz a las necesidades del bien.
 

Somos conscientes de la enorme dificultad que entraña la gestión de sistemas tan complejos como los paisajes culturales, sometidos permanentemente a tensiones muchas veces difícilmente controlables, que debe hacer compatible un planteamiento general e integral del paisaje con políticas sectoriales en materia de Patrimonio, Medio Ambiente, Suelo y Ordenación Territorial que lo condicionan. Además, en el caso concreto de Aranjuez, confluyen sobre una compleja estructura de propiedad, una diversidad de espacios que van desde los puramente agrícolas a los exclusivamente urbanos, todos ellos sometidos a múltiples tensiones y continuas transformaciones.
 

Esta complejidad exige de todos, especialmente de las instituciones y administraciones responsables, un mayor esfuerzo de coordinación en sus actuaciones. Sin embargo, viene ocurriendo todo lo contrario, la concurrencia de múltiples administraciones propietarias de la mayor parte de los bienes que conforman el paisaje, responsables a
Paisaje Cultural Aranjuez: jornadas de participación sobre el Plan de Gestión 4 | F o r o C í v i c o su vez de su preservación, está dificultando la necesaria confluencia de criterios en sus intervenciones llegando, incluso, a utilizar esta situación como excusa para eludir sus respectivas responsabilidades.
 

Por todo esto, desde el Foro Cívico, creemos que la elaboración y aprobación del Plan de Gestión del Paisaje Cultural de Aranjuez nos brinda a todos, y especialmente a las instituciones y administraciones responsables de su preservación, la oportunidad de reorientar estratégicamente sus políticas y encauzar de forma coordinada las distintas actuaciones con el fin de frenar su deterioro y garantizar la preservación de este rico patrimonio. Por otro lado, una exigencia legítima, dado que estamos hablando de la preservación del principal recurso con el que cuenta Aranjuez para conseguir un desarrollo económico y social sostenible, que responda a los retos del siglo XXI. La puesta en valor del Paisaje Cultural de Aranjuez tendría una gran incidencia en el desarrollo económico de Aranjuez, contribuyendo igualmente al desarrollo de Madrid Comunidad. La importancia de este asunto es tal que se requerirían unas jornadas como las que hoy celebramos para profundizar en ello. Creemos, no obstante, que tan solo las tareas de recuperación, mantenimiento y mejora continua de un bien tan excepcional, unidas a su promoción cultural y turística, crearían más de 1500 puestos de trabajo.
 

Desde el foro Cívico estamos convencidos que el futuro de Aranjuez depende en gran medida de la preservación de los valores que lo hacen excepcional, lo que exige, por parte de las administraciones competentes, una respuesta mucho más contundente a los problemas estructurales anteriormente mencionados. Y por parte de la ciudadanía, una actitud más comprometida de lo que ha sido hasta ahora, pues la actitud de las instituciones no es ni más, ni menos, que la consecuencia de nuestras demandas.
 

Para ello consideramos necesario:
 

Garantizar la coordinación y colaboración de las distintas instituciones y administraciones responsables en torno a compromisos concretos, cuantificados y programados temporalmente. Creemos, además, que tanto el Ayuntamiento, como la Comunidad de Madrid y Patrimonio Nacional deben asumir conjuntamente una mayor carga de responsabilidad en el sostenimiento de los bienes, en la dirección de la gestión y en el impulso y liderazgo de las políticas orientadas a su preservación. Estas tres administraciones son las que, en el ejercicio de sus competencias, deben promover la colaboración activa con el resto de organismos e instituciones, especialmente ADIF y la Confederación Hidrográfica del Tajo.
 

Contar con un instrumento de gestión y concertación asumido y participado por todas las administraciones y organismos propietarios de los bienes o responsables del sostenimiento de los mismos; un ámbito donde se fijen los objetivos, se recojan los compromisos asumidos, se determinen las prioridades y se evalúe la gestión realizada; paralelamente, se debería habilitar un órgano de participación que refuerce la transparencia, ayude a canalizar la presencia de la ciudadanía en los ámbitos de decisión y facilite la imprescindible colaboración ciudadana.
 

Paisaje Cultural Aranjuez: jornadas de participación sobre el Plan de Gestión 5 | F o r o C í v i c o Disponer cuanto antes de un Plan de Gestión que, desde una dimensión estratégica, facilite la coordinación, contribuya a mejorar la gestión y a hacerla más transparente; ayude a priorizar y a evaluar las actuaciones que deban realizarse en los próximo años y oriente la elaboración de los planes directores de los bienes gestionados por Patrimonio Nacional, La Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Aranjuez. Asimismo las administraciones competentes deberían abordar, cuanto antes, la revisión del Plan General de Ordenación Urbana vigente, para adaptarlo a los cambios que se han producido desde su aprobación, hace ya veinte años, incorporando los criterios del Plan de Gestión, la delimitación del área declarada Patrimonio Mundial y las determinaciones necesarias que ayuden a solucionar los problemas detectados y garanticen su protección.
 

Comprometer presupuestariamente los recursos suficientes. Aunque el valor excepcional de los bienes incluidos en la lista de Patrimonio Mundial, obliga a sus propietarios y a las administraciones responsables a conseguir y aportar los recursos necesarios para su preservación, dada la experiencia vivida en estos últimos años y la situación lamentable en la que se encuentran algunos de los elementos más sensibles de nuestro paisaje, creemos que se deberían comprometer a corto plazo, a través de un plan concertado, los recursos necesarios para garantizar el mantenimiento básico de los bienes, abordando un plan de choque que frene la alarmante degradación de algunos de sus elementos, y garantizando también un plan plurianual de inversiones que a medio plazo permita avanzar en la recuperación de los distintos espacios y elementos que conforman el perímetro declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO.
 

Hacia una nueva mirada y un renovado compromiso
Desde el Foro Cívico queremos reconocer el impulso dado por el Ayuntamiento de Aranjuez y la Fundación Aranjuez Paisaje Cultural a la elaboración del Plan de Gestión, así como los esfuerzos realizados para lograr la máxima concertación institucional y participación social. Ahora bien, aun reconociendo las actuaciones realizadas durante todos estos años, queremos alertar sobre la necesidad urgente de abordar con determinación los problemas estructurales mencionados, ya que de no ser así, se estará poniendo en grave riesgo el futuro de Aranjuez, no solo de su patrimonio, también de su economía, pues de su Paisa Cultural depende en parte un futuro económico basado en recursos propios claramente diferenciados en un mercado cultural cada día más exigente y globalizado.
Necesitamos nuevos paradigmas que nos ayuden a descubrir en el fondo la enorme potencialidad que subyace detrás de unos valores que han hecho de Aranjuez un lugar excepcional; que nos ayude a ver con mirada innovadora que la historia, el arte, incluso la agricultura y sobre todo el rio (principio y fin del bien patrimonial) forma parte de un todo: EL PAISAJE; creándose así, con esa nueva mirada, una oportunidad de cambio hacia un modelo económico y social más sostenible y justo, quizá también una oportunidad para que quien vive o visite Aranjuez encuentre un mejor espacio para la felicidad. Quizá para esta, la felicidad, creamos los hombres el mito del paraíso.
Paisaje Cultural Aranjuez: jornadas de participación sobre el Plan de Gestión 6 | F o r o C í v i c o NO SOLO LAS INSTITUCIONES, también la ciudadanía de Aranjuez tiene una gran responsabilidad en la tarea colectiva de defender los valores de nuestro PAISAJE CULTURAL y precisamente en momentos como los actuales en los que la desafección de la ciudadanía respecto a las instituciones forma parte sustancial de la crisis en la que estamos inmersos, la defensa de nuestro PAISAJE CULTURAL, con sus implicaciones directas en la economía de todos, puede y debe ser motivo para el reencuentro y el trabajo conjunto. ¡LA CAUSA LO MERECE!
 

Queremos terminar agradeciendo a la Fundación Aranjuez Paisaje Cultural y al Ayuntamiento de Aranjuez la realización de estas jornadas ya que nos da la oportunidad de compartir nuestra percepción sobre la situación actual de nuestro paisaje y los elementos que consideramos determinantes para su gestión y preservación. También nos permiten renovar nuestro compromiso para seguir contribuyendo a difundir, convocar y realizar todas aquellas actuaciones que promocionen y den visibilidad a los valores culturales, históricos y paisajísticos de nuestro municipio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario