Aranjuez Ahora solicita al Ministerio de Hacienda un balance actualizado sobre el plan de ajuste presupuestario del municipio

Nota de Prensa
Grupo Municipal Aranjuez Ahora

Cuatro años después de la puesta en marcha del primero de los planes de ajuste a los que se ha venido sometiendo el Ayuntamiento de Aranjuez, con los presupuestos y las ordenanzas fiscales prorrogados y con una situación económica en caída libre, es hora de que el Ministerio de Hacienda dé alguna explicación. Es por ello que Aranjuez Ahora ha solicitado al Ministerio de Hacienda un balance actualizado del impacto en el municipio de estos planes de ajuste y de su punto de vista acerca de la situación financiera del Consistorio.
Aranjuez Ahora considera que ya ha llegado el momento de tratar seriamente, entre todos los grupos políticos presentes en el Ayuntamiento y con todas las instituciones implicadas, la situación económica del ente local ribereño, asfixiado por una deuda reconocida que supera los 80 millones de euros y a la que todavía no se han incorporado obligaciones pendientes. Con un desajuste entre ingresos y gastos de no menos de cinco millones de euros anuales, va siendo hora de que Hacienda exprese ante la ciudadanía arancetana qué propone para la viabilidad del municipio y qué interlocución mantiene con los representantes del Ayuntamiento para llegar a una solución.
En este sentido, el Pleno de la Corporación rechazó el pasado mes de agosto la incorporación del municipio a los más recientes fondos de liquidez para entidades locales que ha impulsado el Ministerio de Hacienda, toda vez que las magnitudes económicas del plan de ajuste vinculado a esa incorporación y presentado por el equipo de Gobierno no convencieron a los grupos de la oposición. Aranjuez Ahora ha criticado en repetidas ocasiones la insostenibilidad de las cuentas que vienen gestionando los gobiernos municipales que se intercambian PP y PSOE en Aranjuez, pero también quiere hacer constar que los instrumentos que Hacienda pone a disposición de los municipios para rescatar sus finanzas son parches que al final sólo engordan la deuda financiera de los ayuntamientos sin solucionar en absoluto el desajuste de sus cuentas.
Así las cosas, el grupo municipal de Aranjuez Ahora ha registrado una proposición para este pleno de septiembre en la que se insta al Ayuntamiento de Aranjuez a convocar, de manera inmediata antes de que concluya este mes de septiembre, una comisión de Gobernanza y Hacienda que analice en qué situación real están las arcas municipales. La acumulación de déficit año a año ha generado esa deuda viva superior a 80 millones a la que, además, todavía no se han incorporado obligaciones, nuevas o aún pendientes de reconocer, que pueden hacer que se duplique; toda esta situación económica sin control desde hace ya varios años coincide con una concatenación de planes de ajuste que se vienen incumpliendo sistemáticamente y que no dan ningún tipo de solución viable a la situación del Ayuntamiento.

Participación ciudadana
Es urgente la puesta en marcha de una mesa de trabajo que involucre a todos los grupos políticos con presencia en el Consistorio, y en la que participen también colectivos sociales, vecinales y económicos, para analizar en profundidad esta situación y consensuar medidas que palíen una situación que se viene heredando desde hace ya lustros. Existe la posibilidad real de que el Ayuntamiento de Aranjuez pueda verse abocado a un escenario en el que no pueda hacer frente a algunas de sus obligaciones básicas de gasto. Y ante este reto de tal magnitud, no hay soluciones partidistas, personalistas o demagógicas que puedan llevarse a cabo.
Aranjuez Ahora sigue proponiendo un control de la morosidad fiscal del municipio que permita recaudar hasta tres millones anuales, una reorganización de las contratas y externalizaciones que ahorre otros dos millones al año y un frente institucional que mueva a instancias superiores como la Comunidad de Madrid y el Gobierno estatal para que no dejen caer al municipio. Pero sin la participación transparente de todos los grupos municipales y de toda la sociedad ribereña y sin un reconocimiento sincero y realista de los ingresos que la institución genera y de los gastos que asume, no pueden sentarse las bases para una solución sostenible y asumible por la ciudadanía.